Odio

Me carga que sientan eso. No lo valgo, no importa.
Lo detesto… Me hace tener que… cuidar todos mis actos, todas mis palabras. Es una preocupación permanente.

¿Y creen que no se nota? Es tan obvio! Tanto que me dan ganas de patearlos. Quedo con el peso de hacer sufrir por los caprichos de la gente tonta. Yo, weón, soy taaan mala… Hago sufrir taaanto a la gente.

¿O la gente quiere motivos por los cuales sufrir? Me toman como conejillo de indias pa’ incentivar el dolor, porque conocen mi naturaleza sociópata… Me gusta verlos mal, lo saben, les sirve.

Pero no. Ahora no. Lo detesto. Me incomoda. Me enferma.